Ir al contenido principal

El médico del emperador y su hermano: el lenguaje convertido en protagonista





La última novela del escritor cartagenero Roberto Burgos Cantor, El médico del emperador y su hermano, es una oda al lenguaje, a la cadencia, el ritmo y a la infinitud de posibilidades poéticas y líricas que brinda el idioma. Saborear la prosa de Burgos Cantor es catar el vino de la palabra pacientemente añejado en barricas y toneles de tinta, papel, recuerdos, fantasmas  e historias que decantan con el pasar de los años para rendir su buqué y gusto a los olfatos y paladares más exquisitos. El maestro, el mismo de La ceiba de la memoria, El vuelo de la paloma, El patio de los vientos perdidos y otras obras más en el género de novela y cuento, es un artesano de la palabra, la frase, la metáfora. La fuerza que va adquiriendo su prosa, frase a frase, es como aquella que se escucha en las construcciones sinfónicas que evocan a un Bruckner maduro o a un Mahler tardío; aquí no hay minimalismo, pero tampoco desmesura. Es el dinámico equilibrio entre lo íntimo y lo público, entre lo retórico y lo confesional, entre lo lírico y lo épico, entre la tragedia y el entremés. Lejos están las batallas, el ruido de sables y los cañones; aquí apenas reina el ruido del mar, solo destella el azul cálido del Mediterráneo y del Caribe. De la inactividad, de la abulia y la molicie parece surgir la fuerza de la creación, el vigor del trazo, el ímpetu de la palabra.  Ante lo que estamos es el deslumbramiento de la filigrana sobre el gran lienzo de hechos históricos tan lejanos por momentos como cercanos, tan desconocidos como familiares. Leer a Burgos Cantor es evocar lo más prístino de las resonancias del boom, a nuestro premio Nobel, al inefable Carpentier, al osado Roa Bastos, al críptico Lezama Lima. Heredero de su estirpe y su nobleza, el escritor cartagenero nos recuerda lo viva, lo infinita que es la literatura y su hija moderna, la novela; el arte de narrar historias jamás perecerá en plumas como la de Burgos Cantor.

En el fondo, se trata del médico corso Francesco Antommarchi a quien confían el cuidado de un coterráneo suyo: un reo, su paciente, un emperador caído en desgracia por la derrota última ante los ingleses. Un prisionero enfermo que jamás llegará a aceptarlo como su médico, como su sanador; todo lo contrario, le rechaza, lo ignora, lo reduce al título de médico, ni siquiera le llama doctor; un emperador que quiso conquistar Europa hasta los confines rusos y fracasa en el intento; un emperador derrotado, un emperador humillado a quien no le queda más esperanza que esperar la muerte en la isla mediterránea donde ha sido confinado. Y sin embargo Antommarchi es un extraño, un foráneo para el mundo asfixiante y desolado del emperador. El médico descubre para su desconcierto, a un paciente que no quiere dejarse curar, que solo quiere tenderse a esperar serenamente que la muerte invada su cuerpo, un cuerpo donde ya no hay ambición alguna, donde no queda ninguna ilusión, ni esperanza. Pero Antommarchi encuentra una ocupación maravillosa que le permte sobrellevar el tedio de las tardes mediterráneas: continuar el trabajo de otro colega de plasmar en planchas litográficas la anatomía humana, con prolijidad de detalles, de venas y arterias, de músculos, huesos y cartílagos, de conductos y órganos.

Pero la muerte llega pronto, muy pronto y Antommarchi queda liberado de una misión que nunca llega a cumplir cabalmente; y emprende entonces una búsqueda de sentido y propósito a los confines del mundo: el Caribe y específicamente, Cuba en donde se perderá su rastro víctima del mal que él quiere poder curar: la fiebre amarilla. Sólo será años después, que un hermano del médico Antommarchi, llega hasta Cartagena de Indias para sentir las resonancias de su hermano por el Nuevo Mundo.

En breve, una historia sencilla, casi desprovista de anécdotas y de tensión narrativa en donde el lector debe buscar el hilo narrativo más allá de los acontecimientos, en el hermoso tratamiento de lenguaje que Burgos Cantor construye párrafo a párrafo, página a página. Y, a la vez y por otra parte, los personajes que desfilan por las páginas de esta breve novela, que apenas supera el centenar de páginas: el emperador, el médico, su hermano, son seres descentrados que giran cada vez más lento como peonzas a las que se les agota la inercia. Ninguno parece hallar su lugar en los escenarios donde tienen que desempeñarse. La atmósfera que invade a todo es el anuncio de la siempre presente parca; la melancolía y el abatimiento gobiernan todo.

El médico del emperador y su hermano es una novela breve que merece la pena ser leída en la intimidad de la alcoba, pero también en el aula como una lección magistral de escritura. Bien sea lo uno o lo otro, la novela re-crea su rostro una vez más en una espléndida obra que ya ha ganado su lugar en la literatura de nuestro país.


Comentarios

Entradas populares de este blog

Epitafio, el célebre poema de Yannis Ritsos, versión completa en español

Ritsos (1909-1990) es un poeta comprometido con el ser humano, atemporal y eterno. Está del lado de los que sufren, de los vencidos, los oprimidos, los ignorados. Entre su vastísima obra, de más de sesenta volúmenes, se erigen, como faros, poemas como el famoso Epitafio de 1936, Romiosini (Grecidad), y un conjunto de soliloquios dramáticos entre los cuales se cuentan Ismenia, Ayax, Crisótemis, Casa Muerta y Sonata de Claro de Luna . Epitafio , del griego Ἐ πιτάφιος que significa “lamento en la tumba”, es un himno a la vida, al amor materno y a la vez, es un himno a la rebeldía. Ritsos lo escribió en Tesalónica, poco después de una manifestación estudiantil contra el gobierno derechista de Metaxás, en la que asesinaron a varios estudiantes. Un fotógrafo, captó para la posteridad la desgarradora imagen de una madre, hincada al lado del cadáver de su hijo, llorando su desgracia. Ritsos al ver la foto, se encerró a escribir y a los pocos días produj

Logoi, una gramática del lenguaje literario de Fernando Vallejo: inmejorable obra de referencia para el escritor

Estoy fascinado con esta excelente obra que ha llegado a mis manos dieciocho años tarde. Desde que la conseguí, hace un par de meses, no he dejado de recomendarla a todos mis colegas escritores y amigos. Por supuesto que algunos la conocen desde su primera edición en 1983, otros la han perseguido infructuosamente por las librerías de muchos países y por los servicios de ventas por la Internet. Ahora, afortunadamente el Fonde de Cultura Economica ha hecho una tercera reimpresión y se consigue fácilmente en las librerías. No puedo insistir lo suficiente en el carácter esencial de esta obra para todo escritor, ya sea novato, avanzado o maestro. Para el primero, se constituye en una guía básica de cómo el lenguaje escrito se diferencia del lenguaje hablado y cómo usar los numerosos recursos que el primero ofrece, ilustrados con  múltiples y variados ejemplos de los maestros del oficio. Para los avezados escritores que creen que ya dominan la técnica, en mi opinión,  Logoi es una obra p

Entre la Transgresión y la Elevación

  En este breve ciclo leeremos cuatro maravillosas novelas que exploran diferente facetas del sentimiento más íntimamente humano. 🟠 20 de mayo: Historia del ojo de Georges Bataille 🟠 27 de mayo: La casa de las bellas durmientes de Yasunari Kawabata 🟠 3 de junio: Muerte en Venecia de Thomas Mann 🟠 10 de junio: Las edades de Lulú de Almudena Grandes El erotismo no requiere definiciones: se palpa, se intuye, se vive. La literatura siempre ha encontrado un lugar para desarrollar la condición erótica del ser humano. Bien sea desde un perspectiva de enfrentarse a la prohibición con el consecuente deseo de transgredir esa norma o como el experimentar la posibilidad de una elevación hacia lo inefable, lo inalcanzable, lo trascendente. ¿🎁 Quieres participar en el próximo Ciclo de Lecturas Compartdias: "Entre la Transgresión y la Elevación: 4 Novelas Eróticas"? Preinscripción: https://mailchi.mp/50c8afc3955a/entre-la-trasgresion-y-la-elevacion #literatura #literaturaerotica #lit